martes, 6 de diciembre de 2011

[ si ]


Cuando llega a ti no quieres soltarle, nace de la nada misma , como para los creyentes fue formado el mundo desde las manos de Dios. Vertiente sutil y cristalina que emana de las profundidades de la tierra oculta. Se desliza suavemente y se escurre entre las venas, todo lo baña, todo lo remece. Se torna transparente y luminosa, aún cuando la transparencia carezca de color.
Sublime ligereza que amarra los pensamientos, los mezcla , los estruja y los desata. Son las 2:00, 3:00, 5:00 de la mañana y no la quieres devolver... De eso se trata la inspiración.

¿Que no existe?, pues yo te digo que sí.

sábado, 10 de abril de 2010

[ 27 de Febrero de 2010 ]


En 2 minutos y 45 segundos pueden ocurrir muchas cosas inimaginables; puedes perder tu hogar y ver cómo el fruto de tu esfuerzo es devastado; puede desaparecer una localidad completa, sus triunfos y alegrías; puedes ver como la vida se te escapa de las manos sin recordar cuándo fue la última vez que pensaste en la muerte; tu corazón puede ser arrebatado mientras ves partir desgarradoramente a quienes complementan tu ser, y queda un hueco profundo, la mirada vacía, el cerebro nublado, la sangre congelada, las manos sin tacto, los pies sin camino. En 2 minutos y 45 segundos puede desfilar la vida ante tus ojos y culparte por lo que no amaste, por lo que no sentiste, por lo que no perdonaste; puedes sentir en la oscuridad el latir de tu corazón y recordar al Dios que nunca amaste. El ambiente se tiñe de luto y en el colectivo hay una sensación de tristeza. Solo 2 minutos y 45 segundos se necesitan para revivir antiguos temores, para que afloren las inseguridades que te vuelven vulnerable, una especia de tristeza y decaimiento. Una absurda culpa por estar bien y por no haber sido castigados de manera pareja, ¿Cómo se retoma la vida luego de una catástrofe de tal magnitud?

domingo, 6 de diciembre de 2009

[ Del género ]


Siempre me he declarado como una persona no feminista y creo que es por el simple hecho de que me identifico como "persona" y no como género. No sé cuándo nació esa bipartición desagradable. El día de la mujer, las revistas para mujeres, las series de tv para mujeres, las ferias para mujeres, el rol de la mujer, los consejos para mujeres, la frase: quién entiende a las mujeres, y tantas de limitantes.
¿Quién puede comprobar que mujeres y hombres son completamente iguales en su género y completamente distintos entre ellos?. No me siento tan mujer como "nos" describen. Estoy lejos de ser feminista y de luchar por sus derechos; creo en las personas y que entre ellas somos diferentes e iguales.
Odio los encasillamientos, en especial si me atañen; creo que por eso detesto las subculturas, las tribus urbanas, los nombres como "minorías sexuales", círculos religiosos y cuánta cosa quiera encerrarnos dentro de un grupo. El hombre es una vida, y la vida un universo dentro de cada uno, dentro de esa infinitud, ¿es posible acaso definir una sola línea?.
Me desagrada profundamente la visión errática de que las mujeres son sentimientos, fragilidad, delicadeza y puro corazón; ese típico prototipo de teleserie y de películas, esa sensación de que la mujer es "linda" y el hombre "determinante". Tampoco concuerdo con que el hombre sea un bastardo insensible y que todos sean iguales, ¿de dónde salió tanta tontera?
Creo en el tratarnos de tú a tú sin diferencias, creo en la vida, en el interior de las personas, y en autorrealización. No creo en las jerarquías, no creo en los encasillamientos, no creo en las definiciones concretas.

Creo que Estefanía o Estefanío sería exactamente igual.

martes, 18 de agosto de 2009

[ Después de las 00:00 ]












Caída la noche apago la luz, ya no quedan vestigios de partículas luminosas. Reposo la cabeza en la almohada y comienza el film; planifico, medito, me arrepiento; susurros del tiempo pesado como el plomo. Es la instancia clave para los remordimientos.
Tengo sueño, estoy exhausta, y parece que estoy más despierta que nunca.
Paso una navaja por mi cabeza, así como el barbero a la espuma, intento raspar los ecos del pensamiento (me recuerda a Dalí).
¡Debe haber alguna manera!.
Me pregunto dónde está el botón de off para desconectar este artefacto cuya mala costumbra es ponerse ingenioso cuando se descanza. Soy un animal noctámbulo y eso no favorece mis planes de madrugar.

Sugerencia: Darme con un bate en la cabeza.
Recomendación: Hacer mucha actividad física durante el día.
Necesidad: Que el día tenga más horas.
Solución lógica: Tomar algún sedante.
Realidad: Seguiré esperando a que el sueño me alcanze.

martes, 4 de agosto de 2009

[ Abstracto ]


Me pregunto cómo sería si sacara el televisor de mi pieza. Supongo que las ideas fluirían más, y los libros estimularían mi imaginación.

¡Quiero volar!. Sí, volar. ¿Acaso existirá alguna persona que no haya deseado volar?. Recuerdo que cuando pequeña imaginaba que me elevaba y recorría de Norte a Sur mi país, que podía contemplar todo desde el cielo; podía sentir el viento, podía respirarlo, podía acariciarlo con mis dedos. Era sin duda una sensación maravillosa, lo más parecido a la libertad, ¿no? Es curioso que las personas asocien siempre el vuelo con la libertad.
Esta vez quiero volar, pero no por el cielo, sino a través de mi mente adormecida; quiero poder construir paisajes y sensaciones que me hagan sentir grande e importante.
Pasan los días; entre estudios, amigos, familia, trabajo y tareas se nos va la vida, mi vida, la que yo quiero, la que yo sueño, la que tiene valor, la que yo escojo.

Creo que sacaré el televisor.

jueves, 25 de junio de 2009

[ Delincuencia ]


Camino a clases, sentada como nunca en este triste experimento llamado Transantiago, observaba a la gente y sus predecibles caras largas. De fondo, la banda sonora de mi vida mientras las calles desfilaban delante de mis ojos.
Bastó un segundo para que todo quedara suspendido en el aire; delante mío, el hombre que había abordado la micro apelando a la bondad de los pasajeros, pidiendo dinero para sustentar a su familia, para abandonar la adicción, para trabajar dignamente, para costear la grave enfermedad de algún hermano, o cuánta cosa haya inventado, decidió arrebatarle en un par de segundos el celular a un niño que no pasaba de tener los diecisiete años. Nadie más que una señora de edad avanzada se metió en la trifulca colaborando con sus gritos, y yo, mirando atónita la situación no lograba articular palabra alguna.
Relatar el final de la historia no tiene caso, siempre ganan los malos en la vida real. ¡Y sí que ganan!. Ganaron de mi persona el miedo e inseguridad que me provoca el avanzar cada paso en la jungla que está ahí afuera, y peor aún, ganaron el terrible hecho de que llegara a la conclusión de que no se puede caminar ni detener tranquilo en la calle, porque puedes ser víctima de algún lanzaso; no puedes ir en la micro o en el metro porque te das vuelta y eres víctima de un robo; no puedes ocultarte en tu institución académica porque ya comenzaron a introducirse como ratas; y finalmente, quieres refugiarte en tu hogar, pero su seguridad ya fue corrompida.

Qué triste ¿no?.

viernes, 18 de abril de 2008

[ Amor estructural ]


Tras una mirada perdida se esconden miles de pensamientos que divagan en una experiencia llamada Amor.
Amor es el concepto que quise extraer de diferentes maneras, bajo diversas formas y contenidos; sin embargo, si me sitúo en el presente y observo el pasado (gracias a aquella maravilla empolvada llamada cuestionamiento) puedo distinguir lo vacío de lo colmado.
Lo colmado es una de las buenas costumbres del amor, que sin duda nos llena de satisfacciones con su pasar; de esta manera me es mucho más fácil dejar de confundir lo que es de lo que no y puedo afirmar con certeza que lo más próximo a una experiencia benignamente amorosa, sincera, entera, positiva, madura, es aquella que tengo hoy.

Gracias doy por los pasos que recorrí, puesto que de otra forma no hubiese dado con el paradero de ese sentimiento abrasador.

Sí, mientras veo pasar los días tras mis ojos, intento construir el futuro, ese que voy armando mientras junto cada pedazo de presente que florece en el camino.

Si me preguntaran ahora, acaso puedo hablar de amor, respondo con un rotundo sí.

Si me preguntan si sé lo que es amar, no lo pienso dos veces.

Si me preguntan, acaso siento cuándo es la persona correcta, grito a los cuatro vientos mi respuesta.

Porque siempre es sí, porque ahora es siempre, porque fuiste y serás, porque el amor fluye entre nosotros, porque intento capturar nuestra vida, porque incuestionablemente es a ti quién amo, porque cada experiencia me reafirma que solo existes tú.