Caída la noche apago la luz, ya no quedan vestigios de partículas luminosas. Reposo la cabeza en la almohada y comienza el film; planifico, medito, me arrepiento; susurros del tiempo pesado como el plomo. Es la instancia clave para los remordimientos.
Tengo sueño, estoy exhausta, y parece que estoy más despierta que nunca.
Paso una navaja por mi cabeza, así como el barbero a la espuma, intento raspar los ecos del pensamiento (me recuerda a Dalí).
¡Debe haber alguna manera!.
Me pregunto dónde está el botón de off para desconectar este artefacto cuya mala costumbra es ponerse ingenioso cuando se descanza. Soy un animal noctámbulo y eso no favorece mis planes de madrugar.
Sugerencia: Darme con un bate en la cabeza.
Recomendación: Hacer mucha actividad física durante el día.
Necesidad: Que el día tenga más horas.
Solución lógica: Tomar algún sedante.
Realidad: Seguiré esperando a que el sueño me alcanze.
Tengo sueño, estoy exhausta, y parece que estoy más despierta que nunca.
Paso una navaja por mi cabeza, así como el barbero a la espuma, intento raspar los ecos del pensamiento (me recuerda a Dalí).
¡Debe haber alguna manera!.
Me pregunto dónde está el botón de off para desconectar este artefacto cuya mala costumbra es ponerse ingenioso cuando se descanza. Soy un animal noctámbulo y eso no favorece mis planes de madrugar.
Sugerencia: Darme con un bate en la cabeza.
Recomendación: Hacer mucha actividad física durante el día.
Necesidad: Que el día tenga más horas.
Solución lógica: Tomar algún sedante.
Realidad: Seguiré esperando a que el sueño me alcanze.